Según
hemos podido saber por la prensa valenciana, el Ayuntamiento de
Valencia va a realizar una nueva campaña de sanciones para aquellos
ciclistas que circulen por las aceras, parques y jardines o en las
calzadas en sentido contrario al tráfico, cebándose una vez más con el
colectivo más débil y expuesto al tránsito rodado de nuestra ciudad.
Que
como usuarios de este medio de transporte he podido comprobar las
numerosas deficiencias en el firme de la calzada que dificultan mucho la
circulación de los ciclistas por las mismas, amén de poner en peligro
su integridad y la de su propio vehículo. Y aunque muchas de las mismas
están siendo comunicadas al servicio de reparación de 72h del
Ayuntamiento de Valencia, resulta claramente insuficiente. Algunos de
los baches y socavones que podemos encontrarnos en la calzada llevan
meses e incluso años esperando a ser subsanados y no es hasta que se
produce la denuncia ciudadana que estos se solucionan. Corresponde a la
administración pública la realización de inspecciones y controles
periódicos para localizar las numerosas deficiencias y subsanarlas de
modus propio, no siendo una excusa o justificación ni la falta de
personal necesario ni la extensión de la red de la vía pública.
Que en la Zona 30 del centro histórico de Valencia, especialmente en la Calle de la Paz, no
se están respetando las velocidades máximas que marca la ley. Los
vehículos a motor, tal y como he podido comprobar con el cuenta
kilómetros que llevo instalado en mi bicicleta, superan ampliamente ese
límite, sobrepasándome fácilmente cuando yo circulo a 30 km/h.
Que la Ordenanza de Circulación del 17/06 del 2010 expresa en su artículo 41, puntos 2 y 3 lo siguiente:
2. “Los
conductores de vehículos motorizados que pretendan adelantar a un
ciclista, lo harán extremando las precauciones, cambiando de carril de
circulación y siempre y cuando quede, como mínimo, un espacio lateral
libre de 1,5 m entre la bicicleta y el vehículo”.
3.
“Los conductores de vehículos motorizados, cuando estén circulando
detrás de una bicicleta, mantendrán una distancia de seguridad
prudencial y proporcional a la velocidad, que nunca podrá ser inferior a
3 m”.
Que
estos artículos están siendo incumplidos de forma reiterada, puesto que
los conductores de vehículos a motor acosan, increpan y pitan
constantemente a los ciclistas que usamos la calzada en calles y
avenidas para desplazarnos, pasando a nuestro lado a distancias mucho
menores e inseguras y situándose justo detrás en vías de un sentido para
que nos apartemos rápidamente. Resultamos una molestia porque nuestra
velocidad es claramente inferior.
Que
dado que son muchos los riesgos a los que los ciclistas estamos siendo
expuestos de forma innecesaria, es más que comprensible que algunos
estén optando por no jugársela y no circular por estas calzadas
inseguras, donde la administración está consistiendo que los vehículos a
motor circulen a velocidades mucho mayores a las permitidas. Si tenemos
en consideración que algunos de estos vehículos superan los 60-70 km/h y
las bicicletas circulan a una media de 20 km/h, teniendo como máximo
30km/h tal y como marca el Artículo 37 de la Ordenanza Municipal de Circulación,
podrán ver y entender el peligro que conlleva la circulación conjunta
de vehículos a motor y bicicletas en la misma calzada. Resulta
totalmente incompatible.
Por ello desde Cercle Obert de Benicalap exigimos:
Que se aplique la Ordenanza de Circulación del 17/06 del 2010 del mismo modo para el resto de vehículos a motor, con las sanciones que ello conlleva.
Que
se realicen campañas de concienciación e información destinadas también
a los conductores de vehículos a motor (no sólo para recordar a los
ciclistas sus obligaciones) para que entiendan, comprendan y respeten
que los ciclistas somos un vehículo más y que tenemos los mismos
derechos de circular por la calzada con seguridad y en igualdad de
condiciones.
Que se instalen controles de velocidad en la Zona 30 del centro histórico, con especial atención a la Calle de la Paz y
se sancione a los conductores de vehículos a motor que sobrepasen la
velocidad permitida puesto que ponen en peligro a los ciclistas que
circulamos por las calzadas.
Que
el Ayuntamiento de Valencia realice las correspondientes inspecciones
periódicas para comprobar el estado de las principales calles y avenidas
de la ciudad de Valencia, ya que hasta la fecha la responsabilidad de
detectar estos desperfectos depende única y exclusivamente de los
ciudadanos que están haciendo (o quieran hacer) uso del servicio de
Reparación de 72h.
Que
se proteja más a la figura del ciclista dado que la actual ordenanza
resulta claramente ineficaz y su aplicación está siendo totalmente
parcial a tenor de lo visto con las campañas orientadas en la sanción
única y exclusiva de los usuarios de la bicicleta, olvidándose de
reprender también a los vehículos a motor que ni respetan ni entienden
la presencia de los ciclistas en las calzadas.
Que
si este órgano no fuera competente, que dé traslado de este documento a
la autoridad u órgano competente para pronunciarse o resolver sobre las
cuestiones suscitadas en el mismo.
Por CERCLE OBERT DE BENICALAP
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